¿Sabías que uno de los factores de riesgo para el cáncer de piel es la exposición al sol? ¿Y sabías que se puede prevenir con protección solar? Seguro que sí, verdad? Pues a pesar de que lo sabemos, cada año se diagnostican en España 5.000 casos de melanoma y 1 de cada 5 muere.
Hoy, 13 de junio, es el Día Europeo de la Prevención del Cáncer de Piel y quiero aportar mi grano de arena para insistir que, aunque el sol es beneficioso para nuestra salud, es fundamental protegerse adecuadamente.
En España, tenemos la gran suerte de disfrutar de muchas horas de sol, por ello somos uno de los países elegidos como lugar de destino durante las vacaciones. Pero también por ello, estamos más expuestos a los riesgos del sol así que manos a la obra…
Lo primero es recordar que no solo tomamos el sol cuando vamos a la playa o la piscina, durante nuestro mes de vacaciones. Cada día, cuando vamos al trabajo, nos damos un paseo o nos sentamos en una terraza, nuestra piel recibe radiación solar… así que olvídate del calendario y utiliza los fotoprotectores desde que veas que el sol luce durante más tiempo y siempre que estés al aire libre.
Aquí van unos consejos importantes que, aunque lo sabemos, conviene recordar:
- Aplícate el protector solar una media hora antes de la exposición solar y renueve frecuentemente su aplicación, sobre todo después de cada baño.
- La exposición al sol debe ser progresiva, evitando hacerlo entre las 12h y las 16h.
- Evita darte sesiones de rayos UVA, contribuyen a la aparición de cáncer de piel y aceleran el envejecimiento cutáneo.
- Los niños menores de 3 años solo deben exponerse al sol a primeras horas la mañana o al final de la tarde, y siempre con un fotoprotector.
- Utiliza siempre que sea posible gorra y gafas de sol con cristales homologados capaces de filtrar los rayos UVA y UVB. Se recomienda que los niños permanezcan el mayor tiempo posible con camiseta.
- No te seques al sol, utilice una toalla. El “efecto lupa” de las gotas de agua favorece las quemaduras solares y disminuye la eficacia de los protectores solares aunque éstos sean resistentes al agua.
- Bebe agua con frecuencia y zumos naturales con antioxidantes.
- Extrema la precaución en las zonas del cuerpo más sensibles al sol: cara, cuello, cuero cabelludo, orejas, escote, hombros y empeines.
Y por último, además de las cremas solares fotoprotectoras, los expertos también recomiendan reforzar la protección solar con nutricosmética. Se trata de complementos en cápsulas, ricos en antioxidantes y otros activos naturales que evitan el envejecimiento de la piel al tiempo que favorecen el bronceado y evitan la aparición de manchas. Te dejo este interesante video sobre la nutricosmética solar. Bienvenido el verano!
MEDICINA NATURAL 